¿En qué pueden relacionarse el conurbano bonaerense con el emblemático Astillero Tandanor? Una rápida respuesta nos impulsaría a decir “en nada”. Sin embargo, no es así. Desde hace más de un año, cientos de automovilistas del Gran Buenos Aires han comenzado a cruzar las vías del Ferrocarril Sarmiento por unos puentes modulares que se fabricaron, justamente, en Tandanor. Y no serán los únicos, para el año que comienza, están previstos la colocación de varios más sobre la traza del Tren Mitre. Así lo confirmó Miguel Tudino, presidente del Complejo Industrial y Naval Argentino que agrupa a los astilleros Tandanor SACI y N y Almirante Storni, quien nos guió en una recorrida por las 34 hectáreas del predio a orillas del Río de la Plata, hoy en pleno proceso de recuperación de sus plenas actividades.
“Ya hemos colocados puentes modulares en distritos como Ituzaingó y Merlo en un acuerdo con Ferrocarriles Argentinos Operaciones, y aquí estamos construyendo los 12 que serán dispuestos en la traza del (Ferrocarril) Sarmiento y el Mitre en los próximos meses”, cuenta Miguel Tudino a propósito de la ampliación de labores de la empresa que no sólo se dedica a la construcción o reparación de buques. De hecho, la relación con Ferrocarriles Argentinos hizo que en los talleres de Tandanor no sólo se construyan los puentes, sino que se están reparando coches ferroviarios.
“Hay 12 mil metros de puentes que serán destinados a lo que resta de la traza del Sarmiento y también del Mitre, en la zona de Tigre”, agrega Tudino, quien al mismo tiempo rescata que Tandanor como Almirante Storni habían sido reducidos casi a cero en sus operaciones durante el gobierno anterior.
“Cuando comenzamos el 30 de enero de 2020 las actividades estaban casi paralizadas”, cuenta el santafesino quien recuerda que “cuando llegamos le habían puesto llave a este lugar, la disminución de personal que había recibido Tandanor tenía que ver con una idea de achicar el astillero”. Y es por eso que Tudino afirmó: “creemos que hay que hacer lo contrario, agrandarlo y sobre todo diversificarlo”. De eso se tratan, por ejemplo, los acuerdos con Ferrocarriles Argentinos para generar ingresos que permitan sostener las operaciones.
En tanto, Miguel Tudino afirmó que el Astillero Storni lo integran tres naves industriales de 210 metros de longitud a la que califica como una “infraestructura única en Sudamérica y con capacidad de movimientos de descarga de hasta 200 toneladas no lo tiene nadie en la Argentina”.
A orillas del Río de la Plata, allí donde termina la suntuosidad de Puerto Madero y el barrio Rodrigo Bueno gana en presencia, se asienta el complejo Industrial y Naval Argentino, en la dársena sur del Puerto de Buenos Aires, buscar regresar a mejores tiempos en sus casi 142 años de experiencia como uno de los principales actores en la región en la reparación y construcción de buques y barcazas de distinta índole.
La calurosa tarde de finales del 2021 no inhabilita el recorrido por cada uno de los puntos del enorme predio, emblemático y hasta cuestionado en algún tiempo. Allí, Miguel Tudino repasa que en dicho período “recuperamos capacidades de distintas embarcaciones de la Armada, entre ellos, la corbeta ARA Robinson y el aviso ARA Bahía Agradable. Además comenzamos a construir el primer remolcador para la Armada, de un total de 12”.
Por otra parte, se puede observar el pleno trabajo del tramo final de la construcción de un buque hidrográfico “que permitirá el desarrollo técnico y de investigación para el Servicio de Hidrografía Naval” y agrega Miguel Tudino que con financiamiento del FONDEF (Fondo del Ministerio de Defensa) “estamos apostando al ambicioso proyecto de construcción de un buque polar para la Armada que será cien por ciento nacional”
En los comienzos del mes de diciembre, fue el propio Jefe de Gabinete Juan Manzur junto al Ministro de Defensa Jorge Taiana quienes recorrieron el lugar y se firmó un contrato con la empresa Red Chamber Argentina para la construcción de un buque pesquero de tipo fresquero.
La argentina presenta diversidades tan elocuentes que nos llevan a enlazar el Río con el Gran Buenos Aires. De los barcos a los puentes modulares, detrás de ambos, está Tandanor.
