Ariel Sujarchuk, intendente de Escobar cumplió el 1 de junio 2000 días al frente de la gestión municipal y encontró en esa fecha un buen momento para balancear lo hecho pero, sobre todo, trazar los lineamientos de un camino que tendrá como próxima escala el 10 de diciembre de 2023 cuando finalice este período de su gobierno, pero no del proyecto que instauró en Escobar.
A lo largo de un encuentro con periodistas, el jefe comunal y parte de su gabinete repasaron los aspectos más salientes de la gestión local donde en varios tramos, Sujarchuk recordó logros que a nivel municipal sólo se daban en Escobar. De allí que surgió la pregunta si llegó la hora de exportar la gestión a la provincia o la nación. “No lo sé”, contestó sincero el alcalde al tiempo que marcó dos aspectos de su política que cree pueden marcar un camino por afuera de los límites distritales: La conjunción entre Estado municipal y la actividad económica; junto con el desarrollo sustentable. En toda la charla, los aspectos vinculados al medio ambiente estuvieron presente.
De hecho, Ariel Sujarchuk contó que el Concejo Deliberante presidido por Luis Carranza aprobó la construcción del primer parque fotovoltaico del país administrado por un municipio. De allí surgirá la energía solar para alimentar a todos los edificios municipales. “Buscamos convertir a Escobar en la mejor empresa prestadora de servicios”, aseveró el jefe comunal.
En tiempos de pandemia, el desarrollo sanitario es clave para entender el rumbo del gobierno. Y allí , tanto el intendente como el Secretario de Salud Juan Manuel Ordonez. Al repaso de lo hecho, se le sumó el anuncio de la creación de un nuevo hospital municipal en la UDP de Garín con más camas y la apertura de quirófanos.
Otro anuncio fue que ya está en tratamiento de comisión la creación de la Universidad del Delta que será regional ya que no sólo servirá a los futuros estudiantes de Escobar sino de distritos aledaños, como el caso de Tigre.
Si bien durante toda su manifestación Sujarchuk hizo hincapié en temas de gestión, ello no le impidió enviar algunos mensajes a su oposición en el distrito pero sin hacer nombres. Por ahora, las fricciones no trascienden más allá de las redes sociales que, en muchos casos, han suplido las oficinas de atención municipal. Es común que los celulares de los secretarios municipales se llenen de mensajes del alcalde en función de posteos reales y no fake news cuando se tratan de reclamos genuinos.
Por ahora asoma difuso en el horizonte el devenir de la política partidaria y cual es la aspiración de Ariel Sujarchuk. Sí dejo claro que, más allá de si su posibilidad de seguir o no al frente de la comuna en 2023 – hoy la ley no lo permite – construye su propia herencias. ¿Nombres? Circulan algunos. Ninguno levanta demasiado la voz.
La seguridad también formó parte importante de la presentación que se efectuó ante los periodistas en su día. En la agenda de los municipios e imposible alejarse de ello, más allá de quien sea el responsable final. “Escobar ya es el municipio con más cámaras por habitante de la provincia de Buenos Aires”, sostuvo Sujarchuk que recordó el tendido de 250 kilómetros de fibra óptica.
En la provincia de Buenos Aires crece desde hace tiempo en la dirigencia la idea que, en algun momento, un intendente debería saltar de su comuna para sentarse en el sillón de Dardo Rocha. Aquí se mezcla una vieja historia: se mezcla la política y la gestión. Como decía Alberto Fernández de Cristina Kirchner en la campaña de 2019. Con ella sola no alcanza, sin ella no se puede. Lo mismo para la ecuación política y gestión. Una no puede escindirse de la otra. Lo saben los intendentes. Lo sabe Sujarchuk. Pasaron 2000 días desde el 10 de diciembre de 2015. Los próximos 1000 tendrán la respuesta a esta ecuación.
