Por Sebastián Dumont
En cada oportunidad que tiene Javier Milei le dispara a Axel Kicillof acusándolo de ser “un comunista”. Nada nuevo va a descubrirse al observar que ambos, tanto el presidente como el gobernador se han escogido como enemigos políticos. Y se desafían permanentemente. La inversión latente de YPF y Petronas es la última escala de una conflictividad que asoma como la mas trascendente de cara al año electoral. Por la simple y conocida razón que la Provincia de Buenos Aires será la caja donde repercuta el resultado más que en ninguna otra. Pero ahora, Kicillof ha elegido un nuevo desafío a Milei. Y es con mensaje directo a la postura geopolítica que ha diseñado y establecido el gobierno nacional. Su alineamiento con Estados Unidos e Israel contrasta con las buenas relaciones del Kirchnerismo con China como jugador global. ¿Cuál es el nuevo punto de desencuentro? El avance chino en el conurbano desde el ambito académico.
El hecho pasó casi desapercibido, pero desde el 15 al 17 de julio, se llevó a cabo en las universidades nacionales de Buenos Aires (UBA), Lanús (UNLA) y José C. Paz (UNPAZ) el I Congreso de Sinólogos Latinoamericanos, organizado en conjunto con el Centro Mundial de Sinología de la Universidad de la Lengua y la Cultura de Beijing, con la participación de especialistas de la República Popular China y de Latinoamérica. Lo más trascendente sucedió el día del cierre en la Universidad de José C Paz, territorio gobernado por Mario Ishii, acaso el primer intendente del conurbano que le abrió las puertas a China desde un municipio hace varios atrás.
La consigna del encuentro fue: “Hacia una comunidad de desarrollo compartido entre China y América Latina”. En el cierre estuvo Axel Kicillof junto al senador nacional, Oscar Parrilli; el embajador de la República Popular de China en Argentina, Wang Wei; el rector Darío Kusinsky; el presidente del Centro Mundial de Sinología, Xu Boafeng; el ex embajador de Argentina en China y organizador del Congreso, Sabino Vaca Narvaja; y el secretario de Gobierno de la Municipalidad de José C. Paz, Pablo Mansilla, quien estuvo presente en representación del intendente Mario Ishii.
Pero además del congreso en sí mismo, el dato relevante fue que ese día se anunció que en la Universidad se va a dictar una maestría en Políticas de Vinculación con China que será dirigida por Sabino Vaca Narvaja y cuenta con un comité académico integrado por expertos entre los cuales se encuentra la expresidenta de Brasil, Dilma Rouseff. Es decir, en una de las Universidades del conurbano bonaerense creada durante el Kirchnerismo se estudiará la manera de relacionarse con China. Ineludible avance en el área académica del gigante asiático.
Cuando habló Kicillof, dijo que «No es coincidencia que estemos hoy acá, es parte de un camino histórico», dijo el gobernador que recordó los acuerdos firmados por nuestro país en 2004 y 2014, y explicó que “en 2022, tuve la oportunidad de participar de la iniciativa La Franja y La Ruta», en referencia a la estrategia de desarrollo y cooperación internacional considerada como una de las herramientas centrales de la política exterior china.
En el repaso histórico, Kicillof hizo mención a las importantes inversiones que se concretaron en aquellos años como “las centrales hidroeléctricas, los acuerdos de YPF con Xinopec, el Belgrano Cargas, el swap de monedas». En ese sentido, consideró que «las inversiones tienen que ver con el tipo de vínculo, que buscaba el mutuo beneficio para ambos pueblos, no eran acuerdos colonialistas ni imperialistas». Toda una definición la del Gobernador, en momentos donde Argentina ha decidido alejarse de ese eje de manera muy notoria.
La historia de Kicillof con la Universidad de José C Paz es extensa y muy cercana. Gran parte de su gabinete estuvo allí cuando gobernó Mauricio Macri y María Eugenia Vidal. Fue su refugio político y académico. Quizá la figura más emblemática en ese esquema es el ex rector Federico Thea quien hoy preside el Tribunal de Cuentas bonaerense. Pero además por allí pasaron, entre otros Pablo Lopez, Ministro de Hacienda, Agustina Vila, Secretaria de la gobernación, y hay un nexo clave con todos ellos y es el actual Director Provincial de Vialidad: Roni Caggiano, hombre del distrito con fuerte despliegue territorial.
Habrá que prestarle atención a estos movimientos en un contexto geopolítico clave. La decisión de Javier Milei y sus posturas internacionales abren nuevas ventanas para el análisis y las prevenciones. Ya se observó en las señales que ha dado cuando en el aniversario del atentado a la Amia, el Jefe de Estado se mostró con el titular de la Side Sergio Neiffert, un cambio de paradigma que abarca las relaciones internacionales y sus derivaciones. Fue en la semana donde el organismo dejó de llamarse AFI, y volvió a su nombre histórico. Para su nuevo diseño, el Presidente Javier Milei firmó un decreto donde le destina al nuevo funcionamiento 100 millones de dólares. Una cifra que parece abultada, sobre todo por las historias opacas que siempre se han tejido sobre esos fondos. Sin embargo, en un mundo donde, por ejemplo, un banco de primera línea gasta entre 60 y 70 millones de dólares solo en ciberseguridad, no parece una cifra exagerada. Es más, trasciende que gran parte de ese monto será destinado a prevenir ataques basados en el uso de las tecnologías
Asoma como un enorme desafío para la Secretaría de Inteligencia cambiar ese pasado reciente con más oscuros que claros. Uno de los primeros pasos se vio este miércoles cuando asumió Juan Bautista “Tata” Yofre como nuevo responsable de la Escuela Nacional de Inteligencia. “El objetivo es formar agentes profesionales y no militantes que hagan espionaje”, fue lo que dijo Sergio Neiffert cuando presentó a Yofre. Lo escuchaban los invitados al acto, entre los que estaba la Ministra de Capital Humano Sandra Petovello, el ex Presidente Ramón Puerta y el delegado de la CIA en Argentina. Detalles.
Las controversias en la política doméstica no están ajenas al contexto internacional. Las elecciones del domingo en Venezuela son miradas con atención por el gobierno de Milei quien cree, que si gana Trump en los Estados Unidos será un factor clave del eje que se establecerá en América Latina para frenar a los “populismos empobrecedores”. Dicha expectativa llega acompañada de la posibilidad de un desembolso extraordinario de fondos frescos para, finalmente, sortear las trabas que la economía mantiene en su régimen cambiario. La posible llegada de Trump también abriría un nuevo capítulo en la relación con China.
A propósito de China y la política local, un dato más. Cuando en el gobierno de Cristina Kirchner, Florencio Randazzo decidió renovar los trenes tras el accidente de Once, se pactó la compra con al empresa China CRRC Sifang. El acuerdo establecía que además de los coches, la empresa proveería el mantenimiento cada cinco años. Luego, se estableció que sería cada 7 años y medio. El último de ellos debió haberse hecho hace unos meses atrás, pero no sucedió. La administración de Trenes del gobierno anterior hizo todos los papeles pero nunca le dejaron girar los dólares. Por ahora, con la nueva conducción, muy cuestionada, ni noticias. No vaya a ser cosa que por no renovar un ruleman a tiempo, Javier Milei tenga que pagar el costó de explicar un accidente previsible. Por lo pronto, ya lo echaron a Adrián Luque tras un opaco final en su gestión al frente de los trenes
